Pintar cuarto en Querétaro (Provincia): Precio y Presupuestos

Romper las reglas

Lo más común es que se recomiende que los cuartos pequeños se pinten siempre en colores claros y brillantes que reflejen la luz, pero no proceder de esta manera no es obligación. Y es que, un color claro no hará que las dimensiones reales cambien, sino que sólo conseguirá que el espacio adquiera una apariencia delicada y suave. Pero si el usuario en Querétaro no teme a experimentar, debe atreverse a aplicar colores oscuros. Ocurre que estas tonalidades aportan dramatismo y hacen que los espacios, por pequeños que sean, adquieran carácter y presencia. Los colores oscuros además, contrariamente a lo que se piensa, son ideales para los cuartos de descansar, ya que reducen el estrés a la vista y permitan que se concilie el sueño con facilidad.

Pedir un color más claro que el elegido

Si no es posible para el usuario realizar pruebas de color directamente en las paredes que va a pintar, hay un método que puede aplicar a la hora de elegir un color en una carta de pinturas para evitar ser sorprendido por los cambios importantes en las tonalidades. Este consiste en elegir una fórmula que sea un tono, e incluso dos, más clara que la que en realidad le ha interesado. Como la mayoría de los colores se oscurecen una vez que secan, esta estrategia le permitirá obtener justo la tonalidad que está buscando.

Vale pensar en pátinas en vez de colores sólidos

No es estrictamente necesario aplicar colores sólidos cuando se va a pintar un cuarto en Querétaro, ya que es posible crear pátinas de color con las que se puede agregar textura y disimular así las imperfecciones o bien, aportar algo de interés a una pared lisa. Una manera de lograr un efecto pátina es aplicar un color neutro de base y con encima agregar un toque de un color distinto (para la habitación vale probar con un café muy claro y un sepia ligeramente más intenso, por ejemplo). Para conseguir el efecto hay que aplicar el tono base, que puede ser lo mismo el claro que el oscuro y luego, agregar el segundo color girando a mano una esponja de rodillo envuelta en una bolsa de plástico. El resultado será un leve sombreado que le dará mucha profundidad a la pared.