Instalar paneles solares en Ixtlahuaca: Precio y Presupuestos

Hay que hacer la limpieza más frecuente

Para que la absorción de luz solar no se reduzca es necesario que los paneles fotovoltaicos se limpien con cierta frecuencia. Por lo regular, se recomienda cumplir con esta tarea básica al menos dos veces al año, no obstante, si luego de instalar paneles solares en Ixtlahuaca, el propietario descubre que hay demasiado polvo en torno, que una buena cantidad de hojas son depositadas por el viento sobre las celdas o que el excremento de las aves se acumula fácilmente, la limpieza deberá realizarse al menos una vez por mes. Esto promoverá el buen rendimiento del sistema, lo cual, asegura una larga vida útil. 

Hay que usar las herramientas y los productos adecuados

A menudo, todo lo que se requiere para limpiar los paneles es un paño (o esponja suave) humedecido con agua limpia. No obstante, si hay suciedad incrustada (el excremento de las aves, por ejemplo) el propietario de Ixtlahuaca puede utilizar un detergente suave, líquido o en polvo, bien disuelto en agua y una manguera que no lance el chorro con demasiada presión (en ningún caso debe utilizar una hidrolavadora). Lo que nunca debe utilizar es cloro, desincrustantes de baño ni ningún limpiador agresivo para superficies acristaladas o cerámicas. 

Verificar el tipo de agua que se usa es importante

El agua calcárea o con un buena cantidad de  minerales puede dejar al secar una película que disminuye la absorción de la luz y puede, incluso, dañar la superficie de las celdas. Cuando el agua disponible tiene estas características es recomendable agregar una solución que rompa el exceso de minerales, o bien, utilizar agua hervida a temperatura ambiente. Nunca se debe aplicar agua caliente ni tampoco demasiado fría, mucho menos cuando los paneles aún están calientes a causa de la operación regular.

La visita del especialista no puede faltar

Llamar al especialista en paneles solares en Ixtlahuaca para una revisión anual o bianual, es una regla de mantenimiento. Si el propietario detecta problemas en las conexiones, debe llamarlo (o al electricista) antes de intentar hacer una reparación por propia mano.